Davis Mitchell (Jake Gyllenhaal) es
un exitoso ejecutivo que sufre una grave desconexión emocional tras la
repentina y trágica muerte de su mujer (Heather Lind) en un accidente de
coche. Aunque su suegro (Chris Cooper) intenta por todos los medios que
se recupere, continúa bloqueado y se dedica a desmontar compulsivamente
toda clase de objetos. Gracias a la ayuda de Karen (Naomi Watts) y de
su hijo, a los que acaba de conocer, Davis empieza a reconstruir su
vida.